Mandando una lechuza (Libre)

Salí del colegio medio tiritando, el frío de invierno empezaba a hacerse notar en Hogwarts. Me ceñí bien la bufanda al cuello, metí las manos en los bolsillos y empecé a caminar sobre el suelo irregular que llevaba a la lechucería. Aunque no había pasado demasiado tiempo desde que empezó el curso siempre me había gustado mandar cartas a mis padres contándoles lo que había pasado. Rapasé mientras subía las escaleras lo que había escrito esta vez:

Queridos Papá y Mamá:

Me va bastante bien en Hogwarts, todo sigue más o menos igual que el curso pasado, empieza a hacer frío y los prefesores ya han mandado deberes, aunque gracias a Dios todavía no muchos... de momento tengo que hacer un trabajo para Defensa contra las Artes Oscuras y todavía no sé de que hacerlo, vamos que me quedé atrancada en el título.
Bueno creo que de momento no hay mucho más que contar...asique...adios

Había acudido a la lechuzería para enviarle una carta a mi madre. Le quería preguntar que tal estaba, y como le iba a mi hermana en el colegio, ya que este era su último año. Justo cuando me iba ha ir, ví que alguien abria la puerta, no le dí más importancia hasta que ví de quien se trataba. Era Galaxia, sonreí y la saludé: -Hola, ¿Qué tal?- Le pregunté, mecanicamente. -¿Como te va la vida? -Añadí, mientras avanzaba hasta ella, esquivando lechuzas.

Hacía mucho frío, así que cerré la puerta, pero me dí cuenta de que no servía para nada, ya que toda la torre estaba llena de huecos y ventanas sin cristales por donde salian y entraban las lechuzas.

Cuando le estaba atando a la lechuza mi carta en la pata alguien entró en la lechucería. Me giré sobre si misma sin soltar al animal viendo a Su entrar los la puerta.
-Hola -Saludé mientras llevaba a la lechuza hasta la ventana y la echaba a volar. -Estoy bastante bien ¿y tu?¿Qué tal te va?- respondí sonriendo mientras me sentaba en la ventana, la verdad era el único lugar que no estaba lleno de excrementos a parte de la mesa.

- Yo bien, mandando una lechuza a mi madre, ¿Tú?- Le dije, mientras limpiaba con un hechizo el lugar de la ventana donde me iba a sentar. Me senté y le pregunté: - Gala, ¿Quien te gusta?- Le pregunté, con Gala me llevaba genial, pero no tenía ni idea de a quien queria, igual le pasaba como a mí, que no había encontrado aún a su chico ideal. - A mí no me gusta nadie...- Dije, viendo venir su pregunta.
Me remangé las mangas, ese diá hacía bastante calor, y por eso, me había puesto dos coletas, aunque también para hacer la gracia, y reirme un rato.
Esto de que hiciera calor, era un asco, me quitaba todas las ganas de estudiar, y eso que eran pocas...
Miré a Galaxia: -¿Qué quieres ser de mayor? -le pregunté, por simple curiosidad.